VER VÍDEO.
¿Alguna vez has sentido que las emociones te dominan? ¿Te has hecho daño a ti mismo o a los demás por no controlar tus emociones? ¿Cuantos momentos de felicidad te has perdido por dejar que la ira, el odio o el orgullo se apoderen de ti?
Si no dominas tus emociones, las emociones te
empezarán a dominar a ti. Esto no sólo tendrá un efecto negativo en tu salud,
sino que también te hará tomar malas decisiones, actuar de manera inadecuada, y
cometer muchos errores.
¿Quién controla a quien? Tú controlas tus emociones
o las emociones te controlan a ti.
Tú eres de las personas que creen que no se
puede cambiar. ¿De los que dicen así naci y así me he de morir?
Las emociones no se pueden cambiar pero si se
pueden controlar. El temperamento de una persona hace parte de sus emociones.
Las emociones son como un río no se lo puede desaparecer pero si se le puede
cambiar su rumbo.
Hay mucha emociones en nuestro ser que no van a
desaparecer pero si deben cambiar su rumbo.
1. Odiar o aborrecer. Debo odiar el pecado pero
amar al pecador. Proverbios 6: 16- 19 “Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su
alma: 6:17 Los ojos
altivos, la lengua mentirosa,
Las manos derramadoras de sangre inocente, 6:18 El corazón que maquina pensamientos inicuos,
Los pies presurosos para correr al mal, 6:19 El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos.” debo odiar lo malo que hacen nuestros hijos pero debemos amarlos a ellos.
Las manos derramadoras de sangre inocente, 6:18 El corazón que maquina pensamientos inicuos,
Los pies presurosos para correr al mal, 6:19 El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos.” debo odiar lo malo que hacen nuestros hijos pero debemos amarlos a ellos.
2. Enojo. Es normal que nos enojemos cuando
alguien nos ofende pero no es normal que el enojo nos domine. Efesios 4: 26 “Airaos, pero no pequéis; no se ponga el
sol sobre vuestro enojo”
Todos estos sentimientos que están arraigados
en nuestra alma, pero tenemos algunas cosas a nuestro favor.
1. Ahora somos nuevos. 2 Corintios 5: 17 “De modo que si alguno está en Cristo,
nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nueva” una persona no puede ser nuevo pero quedarse
con el temperamento viejo, si somos nuevos lo somos en todo.
2. Dominio propio. Dios nos ha dado el poder de
decidir lo que queremos ser y hacer. 2 Timoteo 1: 7 “Porque no nos ha dado Dios espíritu de
cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio” los hombres no estamos hechos para que
nos controle las emociones nosotros debemos controlar a las emociones.
Cuando José se encontró con sus hermanos tuvo
un choque emocional muy grande. El se acordó de todo lo que sus hermanos le
hicieron. Génesis 42: 7- 9 “Y
José, cuando vio a sus hermanos, los conoció; mas hizo como que no los conocía,
y les habló ásperamente, y les dijo: ¿De dónde habéis venido? Ellos
respondieron: De la tierra de Canaán, para comprar alimentos. 42:8
José, pues, conoció a sus hermanos; pero ellos no le conocieron. 42:9
Entonces se acordó José de los sueños que había tenido acerca de ellos, y les
dijo: Espías sois; por ver lo descubierto del país habéis venido.”
Que haría usted si después de mucho tiempo se
encuentra con esa o con esas personas que le causaron tanto daño.
La verdad es que dominar nuestras emociones en
ese momento es bastante difícil. Cristo nos ayuda pero también es necesario:
1. Darle tiempo al tiempo. No tomes decisiones
a la ligera. Génesis 42: 15 “En esto seréis probados: Vive Faraón, que no saldréis de
aquí, sino cuando vuestro hermano menor viniere aquí” José posiblemente quería ganar tiempo
al igual que tal vez darles una lección.
2. Busca un ancla que controle tus emociones.
Génesis 43: 27 “Entonces
les preguntó José cómo estaban, y dijo: ¿Vuestro padre, el anciano que
dijisteis, lo pasa bien? ¿Vive todavía?” ese polo a tierra que mantenía firme a José
eran su padre y su hermano menor a quien no conocía.
3. No pongas en evidencia tus emociones si
todavía no estás preparado. Tus emociones pueden beneficiar o dañar a otra
persona. Génesis 43: 30 “pues
si no nos hubiéramos detenido, ciertamente hubiéramos ya vuelto dos veces”
4. Busca un momento oportuno para hablar con
los que te dañaron. Génesis 45: 1- 3 “No podía ya José contenerse delante de
todos los que estaban al lado suyo, y clamó: Haced salir de mi presencia a
todos. Y no quedó nadie con él, al darse a conocer José a sus hermanos.
45:2 Entonces se dio a llorar a gritos; y oyeron los egipcios, y oyó también la
casa de Faraón. 45:3 Y dijo José a sus hermanos: Yo soy José; ¿vive aún mi padre? Y
sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban turbados delante de él.” esto nos servirá para conocernos mejor.
El que vivamos bajo un mismo techo o durmamos en una misma cama no significa
que nos conozcamos.
5.
Creer que nada es por casualidad. Génesis 45: 5-8 “Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os
pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios
delante de vosotros.
45:6 Pues ya ha habido dos años de hambre en medio de la tierra, y aún quedan cinco años en los cuales ni habrá arada ni siega. 45:7 Y Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación. 45:8 Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto”
45:6 Pues ya ha habido dos años de hambre en medio de la tierra, y aún quedan cinco años en los cuales ni habrá arada ni siega. 45:7 Y Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación. 45:8 Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto”
6. Estar seguros que el perdonar genera liberación.
Génesis 45: 14-15 “Y
se echó sobre el cuello de Benjamín su hermano, y lloró; y también Benjamín
lloró sobre su cuello. 45:15 Y besó a todos sus hermanos, y lloró
sobre ellos; y después sus hermanos hablaron con él.”
Un hombre sin emociones es un hombre muerto,
las emociones en nuestro ser es lo que nos da vida. Que un hombre sea invadido
de emociones es normal, que las emociones lo controlen no es normal. Controla tus
emociones y vivirás feliz.
Contribuye con nuestro ministerio. Con tu ofrenda podemos llegar a más personas con el evangelio de salvación. CONTÁCTANOS.